La Junta de Gobierno de Confederación Hidrográfica del Segura informó el pasado 28 de octubre de la favorable evolución de la calidad de las aguas del río Segura, tanto en la reducción de la conductividad como en la contaminación orgánica. En el primer aspecto ha disminuido hasta niveles de 1987, mientras que en el segundo nunca antes en la serie histórica de la CHS había reflejado un nivel tan bueno. En conjunto, las mejoras se traducen en el desarrollo de la vida piscícola y en la calidad de los productos obtenidos con aguas de riego procedentes del Segura.
Por otro lado, se ha dado a conocer al organismo las decisiones adoptadas por la reciente Junta de Explotación del río Segura, Mundo y Quípar y la Comisión de Desembalses del Segura, principalmente la de desembalsar entre 350 hectómetros cúbicos (hm3) y 400 hm3 durante el presente año hidrológico.
Del análisis de las precipitaciones se desprende que el 2010-2011 es el tercer año más seco en cuanto a pluviometría de los últimos diez, pese a que las aportaciones finales a los embalses de la cuenca han sido superiores a la media.
También se ha informado de la situación de la regularización del regadío consolidado, que ha
sido posible gracias a la disponibilidad de recursos renovables (desalación). Ya se ha resuelto el correspondiente a la comunidad de regantes de Lorca, presentada a los agricultores el pasado mes de septiembre por parte de la ministra de Medio Ambiente y Medio Rural y Marino, Rosa Aguilar, estando en trámite las de Puerto Lumbreras, Águilas y Pulpí.
A la vez, se ha tenido conocimiento del exhaustivo control que se realiza sobre las 42 masas de agua subterráneas más importantes de la cuenca y de la instalación por imperativo legal de contadores volumétricos por los usuarios, iniciándose las actuaciones con los aprovechamientos superiores a 500.000 metros cúbicos.
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